Comunicado de prensa Comité de Unidad Campesina -CUC-:
Anoche, 20 de noviembre de 2017, 18 familias Maya Qe´chi´s de la comunidad Semuy, Municipio de Cahabón, que habían sido desalojadas violentamente el 3 de noviembre de este año, sufrieron nuevos ataques, ahora con armas de fuego y armas blancas, por guardias de seguridad y cuadrilleros contratados por la empresa Trece Aguas. El primer ataque sucedió a eso de las 18:00 horas, cuando personal de la empresa en mención capturó ilegalmente al compañero Erwin Ché de 54 años, lo amarraron de ambas extremidades y lo amenazaron de muerte con armas de fuego; al ver la situación el resto de familias campesinas se reunieron y lograron liberarlo.
Alrededor de las 22:00 horas, volvió un grupo más nutrido de hombres, rodeó a las familias de la comunidad Nuevo Semuy y de nuevo empezaron a dispararles desde varias direcciones a largo de media hora; en esos momento hirieron de gravedad a Emilio Toc y Ricardo Maquin. Después del ataque las familias se dispersaron y lograron contactar al centro de salud más cercano pero la respuesta fue que la ambulancia andaba haciendo otras diligencias y regresaría horas más tarde. Desgraciadamente en la madrugada de hoy (21 de noviembre, 2017) falleció el compañero Emilio Toc Pop, sin ser auxiliado por personal de salud.
Según testigos, Javier Choc trabajador de la finca Trece Aguas se encargó de dirigir el ataque. Se sabe que en días anteriores ofreció entre Q60 a Q80 a cada hombre de comunidades aledañas a Nuevo Semuy, para intimidar y atacar a las familias desalojadas que se encuentran viviendo en la orilla del camino de terracería que conduce al lugar.
El 5 noviembre una comisión de verificación de los desalojos integrada por defensores de derechos humanos entre ellos dirigentes del Comité de Unidad Campesina –CUC- logró determinar que en las cercanías de las familias desalojadas había un grupo conformado de unos 9 guardias de seguridad armados con pistolas, revólveres y escopetas, intimidando a la población.
La comisión verificadora logró establecer que los guardias de seguridad privada fueron contratados por el dueño del inmueble y que horas antes habían intimidado a las familias desalojadas exigiéndoles que se retiraran del lugar donde se encuentran.
Ante el cobarde asesinato del compañero Emilio Toc y el riesgo que corre el resto de compañeros y compañeras campesinas de la comunidad Nuevo Semuy exigimos:
- Una investigación exhaustiva de parte del Ministerio Público y que se castigue penalmente a los hechores materiales e intelectuales de este condenable hecho.
- A la Comisión Interamericana de Derechos Humanos requerimos otorgar de urgencia las Medidas Cautelares en favor de las familias de la comunidad Nuevo Semuy solicitadas el 16 de los corrientes.
- Asimismo demandamos la intervención inmediata de la Procuraduría de los Derechos Humanos y entidades que velan por los derechos humanos a nivel nacional e internacional para que no se siga asesinando a campesinos inocentes que lo único que buscan es un pedazo de tierra para vivir y cultivar granos básicos.
- A los organismos Ejecutivo (institucionalidad agraria), y Judicial exigimos que detengan los desalojos y que se comprometan a solucionar las demandas de tierra en Alta Verapaz y el resto del país, y que no consientan los actos delictivos de los finqueros y empresarios en contra de la población desposeída.
- A los personeros de la finca Trece Aguas hacemos responsables del asesinato de Emilio Toc, de las heridas y la vida de Ricardo Maquin Yat quién se encuentra gravemente herido y de la seguridad física de seis compañeros (hombres y mujeres) que están desaparecidos, así como lo que pueda pasar con el resto de pobladores de la comunidad Nuevo Semuy, Senahú, Alta Verapaz.
Comité de Unidad Campesina –CUC-
Cabeza Clara, Corazón Solidario y Puño Combativo de las y los trabajadores del campo.
Guatemala, 21 de noviembre de 2017
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